Mostrando entradas con la etiqueta Emilio solorzazno. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Emilio solorzazno. Mostrar todas las entradas

jueves, 27 de agosto de 2009

Relaciones Públicas Superiores. Una Nueva Pedagogía.










Relaciones Públicas Superiores. Una Nueva Pedagogía




Por Román Pérez Senac, Emilio Solórzano Hernández








Capítulo 1:

RELACIONES PÚBLICAS ESTRATÉGICAS EN EL UMBRAL DEL NUEVO MILENIO


En la educación la herramienta más útil para un correcto aprendizaje es la pedagogía. Por lo que se podría decir que las Relaciones Públicas son una pedagogía de la acción relacional, con un contenido ético que da transparencia a los procesos de integración de las organizaciones.

Los conocimientos teóricos deben ser llevados a la práctica mediante la experiencia.

Los autores enfocan aquí a las Relaciones Públicas como una disciplina participante en el proceso de las relaciones humanas y la integración social.

Las Relaciones Públicas predican la cultura de la confianza. Confianza mutua entre la organización y sus públicos. Para ello se necesita establecer condiciones de confianza, donde no se caiga en manipulaciones que degeneren en realidades inversas.

Los intereses de la organización y los públicos deben ser compatibles unos con otros.















Se debe conocer el ambiente en que la organización está inmersa. Dominar el entorno conociéndolo. Cuál es la política, la cultura de la sociedad, estratos económicos, medioambiente, etc. Solo así podremos estar al tanto de lo que nos ofrece ese entorno y el mejor modo de aprovecharlo, y también saber a tiempo cuáles son los riesgos de estar en él.

Con el devenir de los años los valores se han ido perdiendo descaradamente, existe así un nihilismo, un individualismo enfermizo en los seres humanos; por ello se siente esa tendencia de atropellar los derechos fundamentales de la persona humana, ocasionada en gran parte por la desmedida sed de poder, de ganar fácil y mucho.

La buena comunicación es un desafío hoy. Existen infinidad de trabas y descontento social. Ya que el mundo ha cambiado la comunicación debe cambiar; debe ser clara, directa, breve. A pesar de que el ambiente no es del todo prometedor se debe reconocer que aún no se ha llegado al extremo del aislamiento total, aún en estos difíciles momentos los seres humanos se integran unos con otros.



Nos encontramos en una era de dramáticos y apurados cambios tecnológicos. Herramientas que nos deberían servir para elevar el nivel de la comunicación y su calidad dentro de nuestro sistema. Lamentablemente se deja de lado la humanidad de las personas, seres irremplazables, que funcionan a duras penas atontados por el medio en que vivimos. La comunicación es más rápida pero no por ello es de mejor calidad.

El porqué de las Relaciones Públicas


Es necesario saber por qué son necesarias las Relaciones Públicas, si es que queremos saber cómo funcionan.

Al hablar del término "relaciones" hablamos de acercamiento y encuentro humano, resultado de las interacciones producidas dentro de una sociedad.

Los procesos relacionales dados se deben administrar como un sistema para promover la convivencia humana de forma coherente.

Administrar, en este caso, viene a ser la forma en que diferenciamos las percepciones, tendencias y actitudes de cada uno de nuestros públicos. Sólo lograremos esto luego de estudiar, describir y explicar el gran escenario en el que nos movemos como organización y/o públicos. Entonces actuaremos procurando integrar los entes que conforman el suprasistema organizacional, o sea la sociedad.


Si se debe mencionar un valor clave para llegar al corazón del público este es: legitimidad. Legitimar los contenidos comunicacionales mediante desempeños coherentes a discursos ligados a un agente moral. He aquí una de las responsabilidades más grandes de las Relaciones Públicas.

El prestigio de una organización dependerá de que los públicos perciban la coherencia entre lo que decimos y lo que hacemos.

Ante nuestros públicos tenemos una imagen, cada uno de los que integran este grupo de públicos tiene su propia percepción, formada por los medios de comunicación masivos y su experiencia individual. Cada uno de nuestros públicos se forman imágenes parciales, al ser estas imágenes acumulativas y como resultado de la interacción entre las personas, estas percepciones desenfocarán en un concepto público.

La necesidad de habituarse en el entorno es vital para la organización, pero al mismo tiempo debe tener como meta habituarse a éste y administrarlo.